Tras cinco días de marcha desde los Yungas, a la movilización de la Asociación Departamental de Productores de Coca de Productores de Coca (Adepcoca), que “no le quitaba el sueño” a un ministro, le bastó poco más de media hora para tomar el mercado ilegal de coca de Villa El Carmen e incendiar ese recinto, pese a que la dirigencia paralela y sus pocos seguidores resistieron desde el tercer piso atacando con dinamita, bombas molotov e incluso armas de fuego.
Los 500 policías que por más de un mes resguardaron el inmueble, ayer fueron rebasados por los miles de cocaleros que marcharon hacia el mercado de Villa El Carmen. Luego de disparar gas lacrimógeno, los agentes antimotines se retiraron del lugar.
Tras la toma, algunos productores de la institución orgánica destruyeron todo lo que estaba al interior del mercado ilícito: muebles, ventanas, ropa y taques de coca, que según ellos no eran de zonas legales. Diez seguidores del dirigente afín al Gobierno, Arnold Alanes, fueron retenidos y golpeados por los socios de Adepcoca y luego entregados a la Policía.
El medio millar de efectivos, ubicados en diferentes sectores de la zona, fueron rebasados, toda vez que los cocaleros rompieron el cerco policial, para después tomar el edificio.
La determinación de Adepcoca de tomar el mercado ilícito fue respondida con explosivos, bombas molotov, gases e incluso con armas de fuego desde el último piso de la infraestructura.
Estos ataques obligaron a los cocaleros orgánicos a lanzar cachorros de dinamita hacia la estructura metálica de ingreso del mercado paralelo para debilitarla, y así entrar de a poco al interior hasta llegar a la parte superior para capturar a los agresores.
En medio de este episodio lamentable, los productores orgánicos en conversación con Los Tiempos expresaron su molestia contra autoridades de gobierno y Alanes, al calificar de ineficientes y vendido.
Cocaleros piden diálogo con el presidente Arce.
LOS TIEMPOS//